El Deportivo Marítimo ofrece su mejor imagen y sale del descenso (2-1)
El Deportivo Marítimo saldó con victoria su enfrentamiento ante el CD Bala Azul en un momento clave de la temporada. Los goles de Joseph Abdalla y del pichichi Miguel Ángel Cabrera le dieron los tres puntos al equipo cartagenero que abandona los puestos de descenso y que depende de sí mismo para salvar la categoría.

Jornada clave la que afrontaba el Deportivo Marítimo este domingo en su estadio frente al CD Bala Azul de cara a la impresionante pelea que mantiene junto al CD Bullense y a la SFC Minerva por eludir el descenso a Territorial Preferente.
Los cartageneros eran conscientes de que un triunfo ante los mazarroneros no sólo les permitiría abandonar la penúltima posición de la tabla sino que además adelantarían a sus dos rivales directos cuando sólo quedan seis jornadas para que finalice la Liga regular.

Juan Molina, técnico del Marítimo, presentó un once inicial netamente ofensivo con la presencia de jugadores como Sergio Cortado, Fredi, Cabrera y Pipa, dejando claro que sólo le valía la victoria y que iba a por ella desde el primer minuto.
Los locales comenzaron el encuentro haciéndose con el control en el centro del campo aunque ese dominio no se traducía en aproximaciones peligrosas de gol sobre la meta del veterano Emilio. Pero justo a la media hora de juego, el defensa Joseph Adballa aprovechaba un buen balón para estrenar el electrónico del Municipal Mediterráneo y poner por delante a los suyos.

Con esa ventaja mínima se llegaba al intermedio y en la reanudación la tónica cambió. El Bala Azul dio un paso al frente y comenzó a contabilizar mayores ocasiones de gol. Sin embargo, el Marítimo el que lograba la recompensa gracias a un tanto de su pichichi, Miguel Ángel Cabrera, que llevaba la tranquilidad a los aficionados cartageneros.
Pero al final, estos acabaron sufriendo y mucho. Alcanzada la media hora de este segundo periodo, el colegiado decretaba un justo penalti a favor del Bala Azul. Pedro José, que había saltado al terreno de juego quince minutos antes, fue el encargado de ejecutar la pena máxima pero el guardameta Nacho Córdoba le adivinó la intención y detenía el esférico en una acción que a la postre resultaría decisiva.

Y es que el equipo del Puerto de Mazarrón siguió intentándolo una y otra vez hasta que en el minuto 81 el mediocentro y máximo goleador del equipo Carmona sí acertaba a batir la meta del Deportivo Marítimo.
Desde ese instante y hasta el pitido final, el Bala Azul apretó en busca de un empate que nunca llegó y en donde la expulsión con tarjeta roja directa de su jugador Diego Gómez por una dura entrada sobre Chasampi (minuto 91) fue lo único reseñable.